Parlamento cubano: Dícese de una Asamblea humorística compuesta por 612 marionetas humildes y unánimes, que se reúnen de vez en cuando para guataquearle y reirle los pujos a los dirigentes con mansiones, Mercedes Benz y verborrea de la Segunda Guerra Mundial. Su principal objetivo es enunciar los mismos temas de años anteriores, para lo cual crean comisiones con las que descubren lo que todo el mundo ya sabe desde hace 55 años. Como resolverlos no está dentro de su contenido patriótico, las marionetas levantan sus manos aprobando todo lo contrario a lo que desea la gran mayoría de su pueblo, para que así les quede algo de tiempo para desandar La Habana, alabar la comida y la cerveza gratis del Hotel Neptuno, y reunirse con algún espía-héroe que les contará lo bien que se vive en el yuma, así sea en las prisiones federales... Discrepar o pensar diferente es un delito grave dentro de esta "asamblea", el que lo haga cargará con el cartelito de mercenario, gusano y escoria, no importa si es un médico que ha salvado miles de vidas en Haití o en los cerros de Caracas, o si es un deportista que le arrebató una medalla de oro olímpica a un imperialista.
El tema más importante de esta VIII Legislatura es sin lugar a dudas, que equipo ganará el Mundial de Fútbol y quien es el jugador más lindo de la competencia...
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