Ya comenzó el Mundial de Judo con una cifra record de participantes teniendo en cuenta que por primera vez un mismo país puede inscribir dos atletas por división. En esta nueva versión que tiene por sede a Japón, la cuna de esta disciplina en el mundo, están presentes 847 atletas de 111 países.
La indómita Yaritza Abel, representante de los 63 kilogramos, debutará mañana y tendrá un camino bastante difícil para llegar a las medallas. En una división dominada por la anfitriona Yoshie Ueno, la cubana ocupa el puesto número diez del ranking mundial y por lo visto durante esta temporada puede luchar por una de las medallas en Tokio.
La santiaguera, campeona Panamericana y medallista en Copas del Mundo, fue ubicada en el grupo C del organigrama de competencias y en esta primera ronda tendrá por lo menos dos rivales de mucho nivel: la francesa Gevrise Emane, segunda del listado oficial del orbe, y la sudcoreana Ja-Young Kong.
Su primera rival será la húngara Eszter Gaspar y de avanzar como todos esperamos enfrentará a la portuguesa Ana Cachola, una atleta de mucho menos aval y a la que puede vencer sin complicaciones. A partir de entonces el panorama se le complica porque de seguro tendrá que derrotar a la francesa Emane.
De hacerlo pudiera ganar su grupo si derrota a la sudcoreana Ja-Young Kong, la misma judoca que la eliminó en su primer combate del Mundial anterior celebrado en Rotterdam, Holanda. La favorita japonesa Yoshie Ueno estará en la otra parte del organigrama, por lo tanto de avanzar Yaritza sólo la enfrentaría en la discusión del título.
Ya Cuba logró sus primeras medallas a través de Idalis Ortiz en más de 78 kilogramos y Oreidis Despaigne en 100. Tanto Ortiz como Despaigne sólo perdieron en semifinales ante dos japoneses que a la postre se colgaron en sus pechos las preseas doradas. Estas fueron las medallas de bronce número 32 de Cuba en la historia de estos eventos y la número 67 en total.
La indómita Yaritza Abel, representante de los 63 kilogramos, debutará mañana y tendrá un camino bastante difícil para llegar a las medallas. En una división dominada por la anfitriona Yoshie Ueno, la cubana ocupa el puesto número diez del ranking mundial y por lo visto durante esta temporada puede luchar por una de las medallas en Tokio.
La santiaguera, campeona Panamericana y medallista en Copas del Mundo, fue ubicada en el grupo C del organigrama de competencias y en esta primera ronda tendrá por lo menos dos rivales de mucho nivel: la francesa Gevrise Emane, segunda del listado oficial del orbe, y la sudcoreana Ja-Young Kong.
Su primera rival será la húngara Eszter Gaspar y de avanzar como todos esperamos enfrentará a la portuguesa Ana Cachola, una atleta de mucho menos aval y a la que puede vencer sin complicaciones. A partir de entonces el panorama se le complica porque de seguro tendrá que derrotar a la francesa Emane.
De hacerlo pudiera ganar su grupo si derrota a la sudcoreana Ja-Young Kong, la misma judoca que la eliminó en su primer combate del Mundial anterior celebrado en Rotterdam, Holanda. La favorita japonesa Yoshie Ueno estará en la otra parte del organigrama, por lo tanto de avanzar Yaritza sólo la enfrentaría en la discusión del título.
Ya Cuba logró sus primeras medallas a través de Idalis Ortiz en más de 78 kilogramos y Oreidis Despaigne en 100. Tanto Ortiz como Despaigne sólo perdieron en semifinales ante dos japoneses que a la postre se colgaron en sus pechos las preseas doradas. Estas fueron las medallas de bronce número 32 de Cuba en la historia de estos eventos y la número 67 en total.
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