Por Jesus Alejandro Sanchez
No puedo dejar de molestarme al escuchar y leer tantas estupideces. Ver como mi gente pierde el tiempo en una farsa que no le va a resolver nigùn problema y que solo va alargar la agonìa de vivir en una sociedad donde no se puede vivir.
Asì es el Congreso del Partido Comunista de Cuba, el ùnico autorizado por el mismo en la isla y en el cual recaen los destinos de una naciòn que desgraciadamente pone sus esperanzas en marcharse al extranjero o fingir estar de acuerdo con todo para sacar algun provecho o simplemente no buscarse problemas.
Mientras en la alta cùpula se discuten temas aberrantes que debieron ser eliminados hace mucho tiempo o nunca haberse implementado, porque solo dañan la libertad de la mayorìa, el deporte cubano sigue en decadencia.
Los niños siguen sin guantes, ni bates, ni pelotas para entretenerse jugando a la pelota, los estadios siguen sin luces, las salas deportivas con los aires, las pizarras, los asientos y hasta los techos rotos, las piscinas sin agua y las escuelas de alto rendimento disminuyendo su matricula por falta de “presupuesto”.
De esta forma los mejores deportistas cubanos siguen emigrando en busca de la realizaciòn profesional, mientras en su propia Patria los tildan de desertores como si fueran soldados en plena guerra y los que se quedan tienen que conformarse con esperar por alguno de los Juegos Multiples en los que puedan demostrar sus potencialidades, cuando hasta en su paìs se suspenden los Campeonatos Nacionales, y los topes con los mejores atletas extranjeros quedan en el olvido.
Por eso no me queda mas remedio que molestarme, y màs cuando escucho algùn padre que con toda razòn le dice a su hijo, que no puede practicar el futbol porque se le van a romper los ùnicos zapatos que tiene.
Veremos cuando termina este juego ya en extrainning en el cual como dijera un amigo mio: Todo forma parte de un truco y un engaño.