Aclaraciones para los comunistoides fascistas, los patrioteros de solar y los papagayos oficialistas. Criticar el gobierno (ese que eligen sólo 612 cubanos, el mismo que permite los actos de repudio, que no tolera la diferencia, que reprime, humilla, manipula, que acabó con el sistema económico de una nación con sus políticas erradas, que impone y aprueba medidas antipopulares sin consultarnos, que ha sembrado entre hermanos la desconfianza, la hipocresía y la chivatería) no es hablar mal de mi país.
No se equivoquen, hablara mal de mi país si me quedara callado y aceptara lo mal hecho, si no escribiera y diga lo que pienso que es justo para ver por fin a mi tierra libre de una dictadura que nos ha hundido como pueblo. Vivo orgulloso de ser cubano y a nadie en este mundo le permito que maltrate a mi gente, ni nos humillen o digan estupideces sobre nosotros, por qué se lo tengo que permitir a unos corruptos y a unos tiranos?, porque nacieron donde mismo yo nací?, noooo.. esos falsos hijos son los que empañan la imagen de mi isla y mi deber ciudadano es hacerles saber que están haciendo las cosas mal y que a mi no me representa la demagogía y el autoritarismo.
Cuba no es un Cuartel, ni una finca particular, y pensemos como pensemos debemos aceptarnos y respetarnos, de eso depende la continuidad y prosperidad de nuestra Patria. No tengo nada en contra de ninguna ideología, ni ninguna corriente política, estoy en contra de los maltratos, la exclusión, el robo, la falta de libertades civiles, el totalitarismo, vengan de la izquierda o de la derecha.
A mi nadie me ha pagado ni me paga nada por pensar como pienso, siempre he defendido lo que creo es justo. Trabajé para un medio de Comunicación estatal y aunque no creía en su política editorial siempre lo respeté, no por miedo, sino por ética, pero nunca me presté para alabar a nadie ni "combatir" contra su enemigo ficticio, primero por dignidad y luego porque me di cuenta que el enemigo verdadero de mi pueblo siempre ha estado en La Habana.
Hoy que me pago la internet que utilizo, digo y escribo lo que me da la gana, no tengo que guataquearle a nadie ni esperar que el mismo gobierno que me pisotea, me otorgue cuando tenga 50 años una casa donde vivir o una conexión a internet para felicitar en su cumpleaños a un señor que cumplió su deber como cubano, pero luego hizo desgraciados y miserables a la misma gente que lo puso donde está.
Donde quiera que me paro pongo en alto el nombre de mi Cuba, llevo en la sangre la alegría que nos caracteriza (para que no vayan a pensar que vivo amargado por culpa de la situación de mi país), les digo a todos los foráneos que mi isla es la más linda y más acogedora del mundo, que siempre la llevo conmigo, que mi gente tiene un sabor único, y que un día, no muy lejano, será también una tierra próspera y democrática...
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